Leonel Fernández Reyna y el Síndrome de Pilatos...................( Me lavo las manos)

Poncio Pilato, también conocido como Pilatos , fue prefecto de la provincia romana de Judea entre los años 26 y 36 de nuestra era

Según los Evangelios, Jesús fue apresado por un grupo de hombres armados pertenecientes a la guardia del Templo, por orden de Caifás y los sumos sacerdotes. La acusación era sedición. Solicitaron a Pilatos que le ejecutara, ya que la pena capital sólo podía ser aplicada por los romanos. A pesar de no hallarlo culpable, Pilatos sabiendo que era víspera de Pascuas deja que el pueblo decida entre liberar a un preso de nombre Barrabás o liberar a Jesús.

El pueblo liderado por los sumos sacerdotes escogen la liberación de Barrabás y la crucifixión de Jesús.
Ante esa decisión Pilatos simbólicamente se lavó las manos para indicar que no era culpable de la decision o tomada por otros.

http://es.wikipedia.org/wiki/Poncio_Pilatos

Desde entonces la simbología de lavarse las manos cuando se quiere demostrar no culpabilidad o no participación en cosas que suceden se utiliza en muchos sentidos.

En nuestro país podemos observar muchos ejemplos, en que personas que se suponen son los responsables de algunas accioness, utilizan lo que en términos prácticos denominamos “el síndrome de Pilatos”

El presidente de la republica dominicana , Leonel Antonio Fernández Reyna, es quien en teoría dirige los destinos de la nación , es el presidente que elegimos los dominicanos( aunque haya algunos que no votamos por el en este periodo, pero que si lo hicimos en el anterior) y se supone que aunque no somos un país de modelo gubernamental monárquico, de alguna manera el presidente es el Rey, el supremo gobernante y que aunque este ponga al frente de las instituciones publicas algunos funcionarios, se suponen que estos trabajan para el y bajo su responsabilidad.

Estos funcionarios necesariamente tendrán que ser supervisados en su accionar o funcionamiento por su jefe inmediato que es el presidente de la republica, es por ello que el presidente no puede ampararse en el síndrome de Pilatos al pretender esgrimir la tesis de que lo que ellos hagan no es mi culpa.

El accionar de cada  funcionario estatal esta bajo la responsabilidad y tutela de quien los nombra en ese puesto, ya que amen de los senadores, diputados y síndicos que son elegidos por el voto popular, los ministros, directores y encargados departamentales son nombrados por el presidente de la republica, son nombrados por el rey,  y cuando estos parecen obrar sin que nadie los supervise, sin que nadie los amoneste, pareciera que cuentan con la anuencia del presidente  para poder hacer lo que se les de su regalada gana.

Tenemos casos de ministros donde se les ha compobado fallas graves en el manejo de los fondos públicos; graves faltas éticas donde la asignación de contratos favorecen clara y descaradamente a miembros de su familia o a testaferros fácilmente identificables y sin embargo el presidente de la republica acude al síndrome de Pilatos para asumir imparcialidad en estos asuntos que el y nadie mas debiera estar supervisando; pensiones exorbitantes , auto aumentos de salarios, nepotismo , pruebas evidentes de favorecer a familiares con exenciones y contratos para que se lucren y el presidente no hace nada para retirarlos o sancionarlos.

A la hora de administrar fondos publicos en este pais definitivamente se acabo eso de guardar las apariencias , de guardar las formas, sencillamente robarse los dineros del país es un descaro.

Existen decenas de casos donde la corrupción puede ser fácilmente probada en cualquier tribunal  Y no se toman en cuenta.
 La democracia permite que esos casos sean denunciados por la opinión publica sin que haya represalias visibles , pero no pasa nada ya que hay un contubernio entre los jueces ( que son nombrados por el mismo presidente de la republica ) y los funcionares infractores.

La población siente como la corrupción es una máxima donde no hay nadie que nos defienda.

Definitivamente nos jodimos, nuestro presidente parece estar infectado con el Síndrome de Pilatos.